Ventajas de tener una cocina abierta
A la hora de definir como es una cocina, podemos hacerlo de diferentes formas, por ejemplo, según su estilo o según su distribución. Esta última es la fórmula más frecuente y la que seguro se te hace más familiar, resultado de que el espacio del que disponemos sea el principal determinante para elegir entre un tipo de cocina y otro.
No todo tipo de cocina es apta para cualquier espacio y viceversa, es importante por tanto elegir la distribución que nos permita aprovechar el lugar disponible de la forma más eficiente.
Ante esta problemática, surge como solución las cocinas abiertas, que son como su nombre indica, el resultado de que la cocina esté integrada con otras zonas de la casa, normalmente el salón. Esta forma de distribución de creciente interés en nuestro país, es bastante común en países anglosajones, es por esto que este tipo de cocinas eran también conocidas como “cocinas americanas” debido a que en las cocinas de dicho país predomina este tipo de distribución.
Como hemos comentado anteriormente el creciente interés en este tipo de cocinas se debe al espacio, más concretamente a la falta de él. Y es que, este tipo de cocinas, permite disfrutar de espacios más amplios que dejan fluir la luz por toda la casa.
Este tipo de espacios ha sido rechazado durante años debido a problemas con olores y suciedad provocados a la hora de cocinar, pero debido a los avances tecnológicos, hoy en día es perfectamente viable contar con una cocina de estas características sin tener que preocuparte de esto.
En definitiva, contar con una cocina abierta es una solución perfecta para hacer de este espacio el corazón del hogar, un espacio familiar y multifuncional donde compartir nuestro día a día.
En el siguiente blog os hablaremos desde el punto de vista opuesto, donde quieres aislar la cocina del resto de la casa.